¿Te ha pasado que estás cerca del final de quincena o mes y tienes que hacer malabares para poder cubrir los gastos con lo que resta de tu salario?, ponle un alto a esta práctica aplicando estos 6 pasos que te ayudarán a optimizar tu pago de salario y no tengas que optar por hacer uso de tarjeta de crédito.
Define tu disponible
Anota en un papel tu sueldo liquido (ya con todos los descuentos de ley aplicados), teniendo esa cifra clara réstale todos tus gastos fijos como cuotas de tarjetas de crédito, colegiaturas, recibos, servicios, entre otras cosas. Luego de ese ejercicio tendrás un panorama claro de tu dinero a utilizar. Identifica y presupuesta otros gastos
Elabora una lista de gastos que podrías tener para el mes o quincena como supermercado, gasolina o compra de almuerzos diarios. Si tienes alguna salida planificada o un compromiso que implique un gasto también anótalo. Al tener el dato concreto réstalo al salario liquido del punto anterior.
Destina un “diezmo” para tu ahorro
Tras definir tu liquido disponible y haber identificado otros gastos de mes los cuales fueron restados al salario líquido, puedes definir una cuota de ahorro, la cual podría ser el 10% de tu salario disponible final. Este monto puedes convertirlo en un ahorro formal depositándolo en cualquiera de las Instituciones Miembro del IGD.
Haz un diagnóstico personal
Este es un buen momento para hacer la siguiente reflexión acerca de tus ingresos. Si tras haber realizado los tres puntos anteriores te queda un remanente (aunque sea pequeño), estás superbién. Si el caso es todo lo contrario y detectas que gastas más que lo que ganas, es motivo para que pongas atención y empieces a revisar qué gastos estás haciendo que provoquen una fuga de dinero.
Determina un plan de depuración
Si tras el diagnóstico has descubierto que gastas más de lo que ganas, es momento para buscar opciones económicas y reducir o eliminar gastos innecesarios (gastos hormiga). En este punto debes ser muy consciente de lo que realmente necesitas.
Busca asesoría financiera
Debido a la crisis económica que acarreó la pandemia, surgieron diversos servicios de asistencia y asesoría para finanzas personales y familiares, hoy en día diferentes instituciones financieras ofrecen asesoría profesional. La ventaja de este tipo de consejería es que va acompañada de alguna propuesta de solución para tu caso.
Ahora todo está en tus manos. Para llevar a cabo cada uno de estos pasos debes de tener constancia y disciplina. Involucra a cada uno de los miembros de tu familia para que la buena administración del salario sea una labor de grupo.
